Señor, con humildad te pido…
Que mis ojos vean lo mejor en la gente... no sus errores o fallas, como es muy común hoy en día.
Que mi corazón perdone... sinceramente, sin guardar rencor, un perdón verdadero.
Que mi mente olvide lo malo... y que sea pronta para recordar lo bueno, lo maravilloso del milagro de a vida.
Que mi alma nunca pierda fe en ti... y que cada día pueda ver más y más tu poder y misericordia en mi vida.
Amén y amén... para tod@s!